Gracias a la colaboración con un proyecto austriaco, el Departamento de Formación Profesional del Instituto de Estudios Pedagógicos de Tirana inició un experimento en mayo de 2001. Este experimento consistió en crear portafolios de enseñanza en dos escuelas de hostelería y turismo de Tirana y Saranda.
El objetivo principal era mejorar la calidad de la enseñanza y establecer una tradición duradera de usar portafolios con este fin. La necesidad de estos portafolios docentes surgió de varios factores:
Los seminarios se organizaron paralelamente a la creación de los portafolios. Los objetivos eran:
Los portafolios incluían los siguientes contenidos:
Esta buena práctica contribuyó a:
Esta práctica es aplicable directamente en la EFP y también es transferible a otros profesores.